Nos encontramos ante un reinicio de una de las grandes sagas de la ciencia ficción, pero este vez reinicio en toda regla. Realmente es algo complicado de explicar, sin llegar a caer en el espoiler.
En sí, nos encontramos ante una precuela de las cintas que todos conocemos, contando como el cadete Jim T. Kirk comienza su andadura en la academia espacial y por méritos propios consigue el cargo que todos conocemos, Capitán de la nave insignia USS Enterprise. Hasta aquí todo bien, pero este film engloba un guión mucho más complejo de lo que parece, por que no solo es una reinvención del universo de Star Trek que todos conocemos...si no que es el mismo que todo lo que ya hemos visto (se que parece un poco lioso), pero cambiando ciertos parámetros por situaciones perfectamente explicadas e hilvanadas dentro del film.
Desde luego el guión es una maravilla, los efectos especiales otro tanto, las actuaciones no nos dejan indiferentes. En el caso de Spock, interpretado por Zachary Quinto, asistimos un poco más a las costumbres de los Vulcanianos y sus relaciones con los demás. Jim T. Kirk , encarnado por Chris Pine, tiene un cierto toque de humor en sus diálogos, que hace que soltemos alguna sonrisa, pero sorprendentemente estos muy ligeros toques de humor no estan en discordia con el conjunto que estamos viendo.
Y para terminar solo decir que el resto de la nueva tripulación del Enterprise ha sido elegida con cuidadoso esmero y responde perfectamente para ser las versiones jóvenes de la clásica Enterprise. No se podía esperar menos de su director J.J Abrams.
Esperemos que su segunda parte no tarde demasiado en llegar, y según nuestras noticias esta ahora mismo con los primeros toques de desarrollo.
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